martes, 4 de diciembre de 2012

A veces digo y me contradigo con lo que soy y lo que pienso. Esta última historia me trajo para vivir muchos secretos que descubrí sobre mi piel. Supe entonces que después de tanto bajar, subir era la mejor manera para seguir con mi ritmo.
Si, hay momentos en los que daría vueltas el reloj.. pero tan sólo bastaría que extienda mi mano e intente llegar hasta su caricia para volver a tener verguenza por haber sido la mujer que fui. Tantas historias que me invente y que lo hicieron envejecer conmigo. Yo sólo prentedía su amor, yo sólo buscaba que doblara su espada y corriera su armadura de ese material tan inoxidable que se había puesto por algún otro desamor. Ilusioné con estar en la misma historieta un par de veces, pero el amor se me fue de las manos. No lo supe contener y me perdía entre las madrugadas con su voz. Deliberaba con mi alma hasta cuando quedarme en esa historia, me era inaceptable abandonarla antes de tiempo. Eso era de cobarde. Sin embargo, me fui. Y hoy ya lejos de eso que era, vuelvo por algunas tardes y me sonrio. Sigo queriendole como tantos días antes lo habia querido. Sigo buscando que pasen las horas y tal vez nos encontremos otra vez. Con otro pelo, seguro hasta otra mirada, pero si, espero volver a encontrarlo, volver a mirarlo y sonreirle una vez más. Lo quise a mi tiempo, y otra historia más que se va y que nadie sabe que sucederá.