viernes, 9 de noviembre de 2012

Mientras el viernes se estira en el colchón de tantas siestas de lluvia, yo escucho música para el día y me detengo a mirar por la ventana. Me gusta ver llover, me gusta soñar historias en las calles mientras yo estoy adentro, situaciones que se podrían dar en todas esas ventanitas en los otros edificios que dan a mi balcón. Cuanto amor se siente en las tardes de lluvia, cuantas caricias deben ser las más acogedoras para el viernes que empezó con una brisa y se va con su agua que limpia todos los colores del día anterior. Cerca de cambiar de estación, ya se sienten otros aires. Creo que voy a calzarme y voy a salir a armar historias bajo la lluvia..