viernes, 6 de abril de 2012

Cambiando de ciudad, los aires eran distintos, las especulaciones con lo que me iba a encontrar eran totalmente contrarias a lo que me tope.
Habian edades que habian sido más marcadas desde la última vez que las habia visitado, habían pensamientos que afloraban de bocas que no esperaba que salgan de ahi.
Parques distraidos, plazas lloviznadas cantando melodías sencillas que brotaban desde los bancos.
Rara, esta ciudad sí está rara.

Me pregunto de repente si entonces soy yo.. no puede ser que todo este distinto, sí, otra vez, cambie.
Otra vez me encuentro reprochandome mi situación, estoy incomoda en mi piel.

¿Qué será? Ese qué será me da vueltas en la cabeza mientras me quedo mirando un punto fijo tirada en el colchón.. me pongo de costado, tomo aire, lo suelto y trato de silenciarme adentro.
Sin lograrlo del todo, me pongo boca arriba y vuelvo a encontrarme con otro punto fijo que me cuestiona desde lo más mínimo, como lo que le hago a mi pelo cuando salgo en un día de viento, hasta cómo acabo de responderle a la última persona con la que charle.
Hay muchas cosas por ver, cada detalle tiene tanta cantidad de pequeñeces que es casi imposible reconocer a todas.
Que me estoy buscando no hay duda.
El tema es cuando me encuentre.. ¿que será otra vez?