lunes, 16 de julio de 2012

Después de recuperarme y volverme a sentar, me di cuenta que no recordaba lo que casi me mataba antes de la siesta. Hice un poco de memoria y gracias a la cordura que me queda no logré que me ganara la sinrazón. Habían pasado caras por mi pensamiento, dudas,debates conmigo misma, situaciones planeadas, ilusiones, habia habido de todo, hasta la desesperación misma tuvo su lugar. Entonces relaje.Había buscado específicamente una página de internet que me daba su dosis de riudo a lluvia necesario para calmar las tempestades y busqué sacar el rocanrol que me había acompañado toda la mañana por el departamento mientras mi cuerpo ordenaba y gozaba de bailar su canción. Puse un concierto de Bach. Me calmé. De repente ya entreabría los ojos y no sabia bien porque me habia acostado en el suelo, sólo lo pude saber dos horas más tarde cuando un mensaje en el celular sonó y cortó con todo tipo de relajación. Me maldecí por haberlo dejado en sonido,pero supe luego, que sino, iba a perder otro Lunes. Una vez levantada volví a mi ritmo normal. Me pregunto,¿ qué será de todas esas cosas que hace un rato me hicieron pensar? ¿cuándo van a volver? Estoy lista para darles batalla una vez más,esta vuelta, con las cosas en calma.